Dime Luvina a qué te sabe el recuerdo
a qué te recuerda la falta de fe
qué fe le falta al silencio
si silenciosos están los labios
están sosiegos
sosegados
pero despiertos
Dime Luvina a qué te suena el abismo
a qué te abisman los miedos
qué miedo le tienen a la insensatez
si insensatos son tus oídos
son necios
decididos
pero sonoros
Si el extranjero tragó la ciruela
dejó la semilla
en la boca en los labios abiertos en los oídos tenaces
en la rama paciente
en calma
aquella que te sabe a recuerdo que te suena al abismo
de hogar sin fantasmas de sombra extraviada de aridez en ausencia de soledad consolada
de siembra perpetua.
Pequeña tierra que miras de lejos
pero a la que lentamente segura paciente regresas
con las maletas en mano
y la certeza por pies de saberte
Irrepetida con Vida Incansable
ella a la que cantan llaman
dicen Luvina.
PARA LOS QUE DISFRUTAN SER SODOMIZADOS Y PONERLE MUCHO LIMÓN: HASTA QUE NUESTROS BIOPOLÍMEROS SE RENUEVEN. Un poco de relato, ensayo y poesía. Pero también de arrebatos sobre aquellos talentos de la música y el arte visual que vale la pena visitar.
domingo, noviembre 04, 2007
Reminiscencia de Luvina
Humilde, muy humilde homenaje.
Para J.N.C.P.R.V.
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